
Al posarse sobre la rama, el propio peso del pájaro hace que el tendón flexor del muslo, que discurre hacia abajo, por encima de la rodilla, en dirección al tobillo y, rodeando esa articulación y también hacia la parte inferior de los dedos de las patas, se tense de tal forma que mientras la rodilla está flexionada las garras permanecen cerradas.
Fuente: Sabercurioso
Comentarios
"La respuesta es simple: esa fuerza de sujección no le cuesta ningún esfuerzo, pues en sus patas existen unos tendones especiales que les permiten agarrarse al posarse, evitando que pierdan el equilibrio y se precipiten al suelo.
Su funcionamiento es el siguiente:
El tendón flexor del muslo discurre hacia abajo, por encima de la rodilla, en dirección al tobillo y, rodeando esa articulación, también hacia la parte inferior de los dedos de las patas. Así, cuando la rodilla está flexionada, este particular recorrido muscular causa que las garras se cierren. Y para flexionar las rodillas basta el peso del propio animal. Así, sin más.
En contrapartida, cuando el ave quiere abandonar la rama, se ve obligada a estirarse contra su peso corporal para librarse de la presa y poder emprender el vuelo, pero eso es lo de menos."
"Porque su masa es insuficiente para vencer la flexibilidad de la rama donde están apoyados"
...¡y a ver quién le dice que no es cierto!
XD
Estoy sufriendo una avalancha de trabajo muy importante por lo que tengo que bajar un poco el ritmo del blog para poder seguirlo yo mismo!